Qué bonitos ojos tienes.

Hoy, leyendo el post de Mi Librería, sobre la biblioteca afectiva me conmoví, pensando en todos aquellos libros o partes de libros que fuimos una vez y seguimos siendo. Y esta noche, así, casualmente, me pongo a tararear, mientras hacía otra cosa, una canción y esa canción, que ha sido parte de mi tarareo, por decirlo así, toda mi vida, es la bellísima «La Malagueña»  del Trío Los Panchos,de México, la tierra de Ale. En Cuba, de los años 40 hasta digamos los 70 y pico, se oía mucho la música mexicana, sobre todo a través de las películas viejas que reponían en la televisión, a falta de otra cosa, de ahí que mi generación conozca como conoce, canciones que habían sido éxitos dos décadas atrás.

Ahora, que aquí en E.E.U.U. veo a tanto mejicano oyendo y bailando la musiquita duranguense, me entra nostalgia de aquellas canciones gloriosas, con increíbles notas sostenidas, que han permanecido en mi corazón a través de años y años de vida, por su belleza exquisita, por su amor delicado, por frases tan hermosas como:

 «Eres linda y hechicera ,como el candor de una rosa».

Porque así siempre he sentido el amor, lindo y hechicero, mágico más allá de lo explicable, hermoso e ingenuo, como el candor de una rosa:

Por cierto, en este video, dedica la canción, el que la puso, a Sarita Montiel.